La Sra. Edna Goméz, Presidenta de la Asociación Tomas Guarrigue Masaryk, dirigió el evento. A continuación, los principales protagonistas fueron San Nicolás, el Ángel y el Diablo con trajes tradicionales. De acuerdo con una lista preparada de antemano, el Ángel y Nicolás invitaron a los niños presentes a compartir con el público sus poemas, canciones o bailes ensayados. Dependiendo de su edad y habilidades, realizaban breves actuaciones por las que eran recompensados con pequeños regalos de manos del Ángel y del Diablo. La mayoría de los niños prepararon sus actuaciones en checo, lo que fue recompensado con atronadores aplausos.

En toda fiesta infantil mexicana no puede faltar la tradicional piñata, por lo que después todos los participantes salieron al exterior para que los niños rompieran la piñata tradicional en la forma de estrella. La alegría de los niños culminó en su ruptura, cuando una gran cantidad de caramelos se derramó sobre el piso y todos los niños pudieron llevarse un poco a casa.  Además, cada niño recibió una piñata miniatura como recuerdo.

Al final del programa, representantes de la Embajada de la República Checa y de Cónsul de la República Eslovaca desearon a los padres y niños presentes buena suerte y salud para el Año Nuevo y les agradecieron el entusiasmo y los esfuerzos que sus compatriotas dedican a preservar las tradiciones checas y eslovacas y transmitirlas a la siguiente generación. Tras el brindis festivo, llegó el momento de un pequeño refrigerio, que incluyó bramborový salát (ensalada rusa), chlebíčky (bocadillos) y vánoční cukroví (galletas navideñas).